Hoy quiero regalarte un puñadito de abrazos, para que cuando en los malos momentos te abandonen las fuerzas y desfallezcas, te sirvan de apoyo y te ayuden a continuar.
Hoy quiero regalarte un ramito de sonrisas, para que cuando las lágrimas resbalen por tus mejillas, en los días tristes y oscuros, estas iluminen tus desdichas.
Hoy quiero regalarte la fuerza de unas manos, para que cuando los tropiezos te dificulten seguir caminando, te sirvan de apoyo y te ayuden a continuar.
Hoy quiero regalarte una estrella muy brillante, para que cuando tu día parezca noche, sea su luz la que ilumine siempre tu camino.
Hoy quiero regalarte todo mi corazón, por si el tuyo se rompe en mil pedazos, con el mío podamos vivir las dos.
Transforma estas líneas en cariño, en ternura y siempre ten la certeza de que nunca te dejaré sola.