21 nov 2013

*Tiempo*


Tiempo para recordar, tiempo para llorar, tiempo para que cicatricen las heridas, o sencillamente para esconderlas y tratar de disimularlas, para que no duelan tanto.
Tiempo, mucho tiempo que no te veo y que no puedo escuchar tu voz, horas, días, meses duros muy duros y así ha pasado un año. Un inmenso año, repleto de vacios, de lágrimas amargas en las que tratas de convencerte, que es mejor así, que tu calidad de vida dejaba mucho que desear, que así no podías seguir, que tanto dolor y sufrimiento era inhumano.
Que necesitabas descansar, y era verdad, estabas agotado, pero duele tanto, es tan duro pensar y sentir que ya no hay más, que se agotó la arena de tu reloj, que la puerta se cerró con candados de plomo.
Y eso es lo que hay muchas veces en el corazón, plomo, que pesa hasta hacerte caer y no dejarte levantar del suelo, que aplasta el pecho y no deja entrar el aire. Que el cuerpo duele como si alguien apretase tus huesos. Y es en esos momentos, cuando te gustaría poder gritar y rabiar y patalear y….para que?...de qué sirve?
Hoy te escribo, porque es lo único que ya puedo hacer por ti, dedicarte hasta la última línea de lo que los sentimientos mandan, con ello te hago mi pequeño homenaje. Hoy quiero decirte muy bajito o lo más alto posible, para que te llegue bien clarito, que te quiero, que te he querido hasta doler, y que siempre va a ser así.
Vaya alto, muy alto mi cariño para ti

                                                                                  

17 nov 2013

*Para Ti*


Llegaste llamando fuerte, un 18 de Noviembre, y mentiría si no dijese ahora que cambiaste mi mundo en el momento que te tuve en mis brazos. En ese preciso y precioso instante, te convertiste en la razón de mi vida.
Hoy hace 23 años, que todas mis ilusiones, mis sueños y deseos han ido a desembocar en tu alma, que mis miedos, temores, y desvelos, se pasean por tu espalda. Una espalda completa de luchas y miles de batallas.
Inventé para ti, los mejores cuentos de princesas, de duendes y de hadas. Un mundo donde pudieses soñar con seres mágicos, luces brillantes y zapatos de cristal.
Mi querida hija, mi amado tesoro, mi mariposa de sueños, como expresar con unas torpes letras, todos los sentimientos acumulados. Como decirte que me gustaría poder poner en tus manos, todo lo que tu corazón sueña y anhela, pero no puedo, eso solo depende de ti.
Quizá  sea hora de ser un poco egoísta y mirar más por ti, de lo que lo has hecho hasta ahora. Lo mismo es tiempo ya de que dejes de pensar en lo que sienten y necesitan los demás, y te centres y te preocupes un poquito más de ti misma.
Tienes mucho que dar, mucho que vivir, mucho por sentir, eres una luchadora, una guerrera nata, doy fe de ello, y por tanto no dejarás que los errores se repitan. Recógelos, como si fueran ladrillos, apílalos uno tras otro, construye murallas y fortalezas en las que puedas cobijarte.
Disfruta la vida y vístete, no con ropa de saldo, sino con el traje más elegante, pues la ocasión bien lo merece. Vive, ama, ríe, llora cuando tengas que llorar, pero no dejes que otros decidan cuando tienes que hacerlo, ni por qué. Después de todo, es quien se decide a buscar quien encuentra.
Es tu vida, y tú decides como vivirla, el conocimiento no se encuentra en las respuestas, sino en la inquietud de las preguntas. Las piedras por más que las pulas y trates de cincelarlas, siguen siendo piedras, sin brillo, sin destellos y nunca te llevarán a ningún lado.
Yo solo puedo acompañarte y levantarte cuando caigas, secarte las lágrimas derramadas, abrazarte y decirte al oído lo mucho que te quiero y lo orgullosa que estoy de ti.
Que te quiero: MÁS QUE A MI VIDA
Que te deseo lo mejor: EN TODO MOMENTO
Que puedes contar conmigo: SIEMPRE
Pero eres tú y solo tú la que decide cual ha de ser tu camino y cómo quieres hacerle.

¡¡¡Feliz cumpleaños hoy y siempre!!!